Los gatos se caracterizan por ser curiosos, independientes y un poco traviesos, además de juguetones. Aunque este pequeño felino también es holgazán, pues duerme, de media, entre 13 y 16 horas diarias. Algunos, incluso, podrían estar hasta 20 horas al día durmiendo.

Los que comparte su hogar con este pequeño felino lo saben bien, pues se lo han encontrado por su casa, a cualquier hora del día, durmiendo plácidamente. La postura que adopta su gato, además, puede ser muy variada; en ocasiones está bocarriba, enroscado, de lado o estirado en el suelo. Es interesante conocer qué quiere decir cada una de ellas, para así comprender el lenguaje corporal de nuestra mascota.

Esto es lo que dice la postura que adopta tu gato cuando duerme

La temperatura puede ser un aspecto que tenga impacto en la postura que adopte tu gato cuando duerme. Si tiene frío dormiría enroscado, tomando una forma de media luna. Así, además de sentirse seguro, pues 'protege' sus zonas vulnerables, como la cabeza o la tripa, conservará mejor el calor.

Cuando hace calor, sin embargo, suelen dormir más estirados. En ocasiones, incluso, lo hacen en el suelo, aprovechando que este estará fresquito. Si vivimos en una zona en la que las altas temperaturas son las protagonistas podríamos comprarle una camita que, mediante ventosas, se coloque al lado la ventana, pues en verano le encantará echar un sueño sobre ella apoyado en el cristal.

Para sentirse seguros en ocasiones también optan por 'esconderse' para dormir. Por lo que es habitual que busquen algún rinconcito para echar un sueño como un armario o una caja. Además, en estos lugares más recónditos nadie les molestará y podrán descansar tranquilamente.

Otra postura muy recurrente en los gatos es bocarriba. Con ella quieren decir que se sienten muy seguros, ya que dejan 'desprotegidas' la panza o la garganta, dos zonas muy delicadas. Si nos encontramos a nuestro pequeño felino durmiendo así, es que confía en nosotros.

Cuando nuestro gato duerme de lado, con las patitas estiradas, también quiere decir que está feliz y tranquilo. Igualmente estaría relajado si nuestro pequeño felino adopta la postura 'pan', es decir, 'guardando' las patas delanteras y traseras bajo el cuerpo, aunque esta le permitiría 'activarse' en cualquier momento, por lo que de igual modo significaría que está alerta.

Si vemos al gato dormido abrazado a otro gato o a otro animal doméstico que tengamos en casa, como un perro, es que claramente le agrada ese compañero y está totalmente cómodo con él. Al igual que si eligen nuestras piernas, pies o pecho para echar el sueño, lo que también pueden 'aprovechar' en invierno para calentarse.