Victoria clave el Cádiz CF Mirandilla en el campo del descendido Cartagena B (0-2), donde el equipo de Cifuentes debía dar la de cal para aspirar con garantías a la permanencia, ya que de lo contrario habría dado otro paso hacia la pérdida de categoría.

Hay que hablar de una primera parte de dominio del filial gaditano, consciente de que no podía especular, que llegó en más ocasiones y con mayor peligro al área contraria. Una labor que facilitaba la frialdad que mostraba el Cartagena B, ya descendido, que jugaba a unas revoluciones menores como era de esperar.

Había ciertas prisas en el Cádiz CF Mirandilla para no dejar los deberes de cara al tramo final del choque. De esa manera, en diez minutos desde el arranque los de Cifuentes tuvieron dos ataques que bien pudieron dar paso a abrir la cuenta; Bouba Barry se topó con Saldaña, mientras que Youba Diarra envió fuera otro ataque claro tras combinar con Kensly.

El filial murciano trataba de ganar presencia en la zona ancha para tener algún protagonismo en la creación de juego, si bien los males que le han llevado a ser el último de la fila salieron a relucir en este partido. El duelo entró en una fase de inactividad pero sin sufrir el cuadro visitante hasta que pasada la media hora Mirada acertaba con la portería para derrumbar la resistencia local.

Los 14 minutos largos hasta el descanso acomodaron los conceptos del Cádiz CF Mirandilla para cerrar filas y buscar ataques rápidos como los dos que finalizó Moussa cuando tuvo cerca ampliar la cuenta si no hubiera enviada alta una combinación con Borja Vázquez y, posteriormente, se hubiera estrellado contra una gran intervención de Saldaña, que salvó un mano a mano ante el pivote.

Y como el fútbol es caprichoso, Diego Iglesias tuvo la igualada en el único acercamiento con peligro del Cartagena B, que no tuvo profundidad cuando el balón estaba en su poder en la parte del campo que defendía el equipo gaditano.

Tras el paso por vestuarios, el técnico cadista no quiso riesgos con el amonestado Youba Diarra, que salió del campo para que ingresara Luis Morales. Las sensaciones iniciales eran similares aunque daba la impresión que el conjunto departamental intentaba dar un paso al frente para equilibrar la balanza y evitar la enésima derrota ante sus seguidores.

Definitivamente el filial blanquinegro apretaba el acelerador en ataque y Cellou rozó el empate de no ser por la parada de la tarde a cargo de Víctor Aznar, que salvó a los suyos en el inicio de una fase de mayor sufrimiento.

Se movían los banquillos buscando cada equipo sus intereses pero por encima de todo el miedo en los cadistas a encajar un gol con sabor a descenso. Jugar con esa presión también se notó en algunos instantes sobre la hierba del Estadio Mundial 82.

El segundo periodo avanzaba hacia el 90' con pocas ocasiones y un Cádiz CF Mirandilla cuidando al milímetro no cometer errores en facetas defensivas; era clave resistir con el 0-1. Las avanzadillas hacia la portería de Saldaña se redujeron, mientras que el equipo de casa no encontraba la manera de ver cerca con más asiduidad el rostro de Víctor Aznar.

Todo transcurría igual hasta el 80', momento en el que Luis Morales anotó el segundo para los cadistas y sentenciaba el duelo en el feudo del colista y descendido Cartagena B, que había cometido un error claro en defensa y a partir de este tanto bajó los brazos esperando el final del encuentro.

Con esta victoria, el Cádiz CF Mirandilla gana una bola de partido y se acerca con más opciones a la permanencia a la espera de dos jornadas a cara de perro contra el Atlético Antoniano (en El Rosal) y La Unión (fuera), dos conjuntos metidos en problemas especialmente con la plaza de play-out.